La Habana de Carpentier
«La Habana de mi infancia era una ciudad de repique y repiqueteos: de cascabeles, de cencerros, de esquilas y esquilones, de campanas arrabaleras, de bordones catedralicios…»
De aquellos obligados caminares por La Habana Vieja me quedó una siempre renovada emoción al contemplar, de años en años, sus casas antiguas, sus rejas andaluzas, puertas claveteadas, pórticos barrocos, portafaroles, guardacantones y guardavecinos… Muchas páginas he escrito desde mi adolescencia acerca de La Habana Vieja “de intramuros””, con sus calles eternamente abocadas al mar, completadas en su panorama por un velamen, la proa de una balandra, la quilla de un buque, se hace ciudad de misterios, de nocturnidad, de cuchicheo detrás de persianas, de invitaciones al viaje que, con solo cruzarse el puerto, puede conducir a las suntuosas coreografías de una iniciación ñáñiga, a un encuentro fortuito con gente de otras latitudes que remozan en pleno trópico, la literatura del anhelo de evasión y del muelle de las brumas…».
Alejo Carpentier, un hombre de su tiempo,
Editorial Letras Cubanas, 2004
posted by Rossimilio at 10:51 a. m.
2 Comments:
La Habana es Cádiz con más miseria, Cádiz es la habana con más mangantes (allá por San Juan de Dios)
La Habana me hizo cambiar muchas facetas en mi pensamento.
Cuando viaje a Cuba, primero fuí a La Habana y despues ha Varadero, pero con mucho gusto hubiera renunciado a Varadero por seguir paseando y conociendo el pueblo cubano.
No creo que La Habana tenga miseria, sino pobreza y necesidad.
Sobre todo si la comparamos con las necesidades de consumo que nos hemos impuesto en las sociedades ¿modernas?.
Ví un pueblo alegre y sobre todo orgulloso, y lo mas bonito de La Habana, lo que no te enseñan en los catalogos.
Lo mas bonito, perderte por sus calles y estar con sus habitantes.
Saludos de nuevo.
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