Felices Navidades

Un saludo a tod@s ustedes.

Se acerca la Navidad y quiero que sirvan estas líneas para felicitaros a tod@s l@s que me leéis habitualmente estas fiestas. Quien me conozca personalmente sabrá de mi distanciamiento emocional con estas fiestas. Como cristiano me quedo con lo que de verdad supone: la conmemoración del nacimiento de Jesucristo. Lo demás es puro accesorio y cada año me interesa menos.

Desde que entré en la adolescencia estas fiestas siempre me han resultado incómodas. El hecho de celebrarlas en casa en familia con la ausencia por motivos laborales de mi padre ya me hacían sentirlas como un período de ausencia. Posteriormente, con el fallecimiento de mi abuela allá en el año 1994 le terminé de pillar la aversión que profeso actualmente.

Las Navidades son unas fiestas en las que, a diferencia de las restantes, uno no se puede escaquear. Los compromisos familiares y de consumo son ineludibles y año tras año hay que pasar por el aro de dichos compromisos. Cuando llega laa noche del 6 de enero mi cuerpo se relaja y tengo la sensación de que he superado un Rubicón más de los muchos -ojalá- que me quedan por vivir con carácter anual.

Bueno, de todas formas, y aun siguiendo el compromiso gregario socialmente aceptado, mi blog se suma a aquellos que felicitan la Navidad. Y por mi parte desearos a tod@s ustedes unas Felices Navidades. Que las disfrutéis en familia y que ojalá los que falten en la noche del día 24 de diciembre a la cena familiar estén siempre presentes en el recuerdo ese día y también los 364 días restantes.