Media maratón Sevilla-Los Palacios

Un saludo a tod@s ustedes.

Dolorido y exhausto el día después de correr la Media maratón Sevilla-Los Palacios. Es sin lugar a dudas la carrera popular que más me gusta. El ambiente de corredores es impresionante (3.300 corredores, de los cuales finalizaron 2.807) y aparte de eso la animación a la entrada de Los Palacios es alucinante. Jamás he visto por Andalucía una prueba con tantísima animación como esta Media maratón.

Esta Media la afrontaba con el objetivo de intentar moverme entre 1:35-1:36. Las sensaciones antes de la carrera eran buenas, pese a las malas sensaciones del sábado tras tener la comida navideña del trabajo, con lo que conlleva esos eventos. Por la mañana hacía fresco, sin llegar al frío desagradable de la Media de Córdoba, y con un sol que animaba a correr. Tras la salida me sorprendió la rapidez con la que afronté los primeros kilómetros y, sobre todo, que no hubiera atasco de corredores en la salida.

Los primeros kilómetros iba bastante cómodo y fluido. La cuesta del km. 7 se me atragantó un poquillo, y después otra subida en el kilómetro 10 que me hizo pasar por esa distancia en 44 minutos. Y a partir de ahí me uní a un grupo liderado por una chica del Club Atletismo de Los Palacios al cual traté de aguntar. La chica decía que iban rodando en torno a los 4:20 min./km. Eso me animó a hacer de kamikaze atlético y decidí aguantarlos hasta que reventara. A partir del km. 17, justo a la entrada del pueblo me quedé sin piernas. Esos 4 kms. los hice sufriendo y agonizando pero a la vez disfrutando del ambientazo del público volcado por las calles de Los Palacios. Y de ahí, rodaje por el pueblo sufriendo hasta llegar a la última recta, la avenida principal del pueblo que tradicionalmente se nos hace a tod@s l@s corredores y corredoras interminable. Llego a la pancarta de meta y finalizo en unos discretos 1:37:45, lo cual supone mi promedio habitual en la distancia de 4:38 min./km. De todas formas estoy muy satisfecho por el resultado logrado y, sobre todo, por haber disfrutado de esta bella prueba.

Tras la carrera disfruté de una tarde en Sevilla acompañado de Rafa y Raquel, dos compis de trabajo que acudieron a Los Palacios a recogerme y a echar la tardecita en Sevilla, paseando por el bullicioso centro histórico en plena vorágine navideña. Y de ahí a llegar a casa por la noche de recogida y caer rendido en la cama ante tan frenética actividad.

Bueno, con esto pongo fin al periplo atlético del año 2008, un año de mejora y recuperación tras el mediocre año 2007. Ahora toca pensar en el 2009, que se avecina ilusionante y con un posible debut en maratón, pero todo ello dependerá de si me porto bien en las Navidades.